El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, hizo un llamado a todos los propietarios y administradores de edificios, escuelas, colegios, universidades y organizaciones de todo tipo a adoptar estrategias clave para mejorar la calidad del aire interior en sus edificios y reducir la propagación de COVID-19.
Una comunicación enviada por la Casa Blanca dio a conocer el “Clean Air Building Challenge”; con el que apela a la acción ciudadana para que edificios de todo tipo evalúen la calidad del aire interior y realicen mejoras en la ventilación y la filtración de aire para ayudar a mantener seguros a sus ocupantes. Como parte del “challenge”, la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) publicó una guía de mejores prácticas para optimizar la calidad del aire interior y reducir el riesgo de esparcir partículas peligrosas en el aire. Esta guía, desarrollada en colaboración con el Departamento de Energía, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y otras agencias federales, contiene un conjunto de recomendaciones y acciones claras que los propietarios y administradores de edificios pueden implementar. Incluye pasos rápidos que todas las organizaciones pueden tomar de inmediato como punto de partida, así como recursos para ayudar a planificar inversiones y mejoras a más largo plazo.
“Consideramos que el reconocimiento del presidente de los Estados Unidos y de toda su administración sobre la importancia de la protección, desinfección y tratamiento del aire compartido en espacios interiores es un paso afirmativo en dirección a una nueva etapa de la pandemia en donde deberemos enfocarnos en adaptar las infraestructuras de nuestros edificios para hacerlas capaces no solo de eliminar el COVID en el aire, sino que sean resistentes a cualquier variante novel o ante el surgimiento de virus similares de propagación aérea”, indico el puertorriqueño Nelson Traverso, miembro de la Junta Independiente de Investigación Estratégica del Aire Compartido.
La iniciativa forma parte del Plan Nacional de Preparación para el COVID-19, que la Administración Biden-Harris publicó a principios de mes. El plan, diseñado por miembros de su gabinete y altos funcionarios de sus principales agencias, se trabajó como hoja de ruta para que la nación americana avance de manera segura y continúe luchando contra el COVID-19 a medida que los ciudadanos regresan a sus rutinas más normales.
La Administración Biden y el Congreso establecieron, además, que trabajarán en estrecha colaboración con el sector público como las escuelas para brindar orientación y asistencia técnica para realizar mejoras y conectarlos con los debidos recursos sobre la calidad del aire interior.
Asimismo, señalaron la importancia de crear conciencia pública sobre las mejoras de ventilación y filtración para reducir la propagación de enfermedades en los edificios.
Si bien la Administración invita a todos los propietarios y administradores de edificios a tomar medidas de protección del aire limpio en sus instalaciones, también fomentará esfuerzos entre el gobierno federal y expertos externos para su implementación. A tales fines, desarrollará estrategias de reconocimiento en el que incentivarán a aquellos propietarios de edificios que hayan tomado los pasos necesarios para la salud y seguridad de sus comunidades al mejorar los sistemas de ventilación y filtración de aire para proteger y promover la salud pública.
“Esto es un paso trascendental de parte del gobierno federal ya que invita a la empresa privada y grupos multisectoriales de expertos en el tema a trabajar colaborativamente para proteger y mejorar la calidad del aire mediante la integración de tecnología de última generación capaz de eliminar patógenos responsables de estos virus”, añadió Traverso quien también dirige la fundación Puerto Rico Leads Las Américas que advoca por el acceso a aire seguro y limpio de patógenos.
Finalmente, el Plan Nacional de Preparación para el COVID-19, indica que catalizará la innovación científica y tecnológica para reducir la transmisión de enfermedades en interiores. La Oficina de Política Científica y Tecnológica (OSTP, por sus siglas en inglés), en coordinación con otros socios a través del Grupo de trabajo de innovación pandémica, está identificando oportunidades para impulsar la innovación y la implementación de tecnologías para apoyar el aire interior limpio en los edificios y reducir la transmisión de enfermedades. OSTP también organizará una serie de compromisos públicos para proporcionar la ciencia, las herramientas y las mejores prácticas más recientes para mejorar la calidad del aire interior.
El Plan Nacional de Preparación para el COVID-19 es un documento que dio a conocer la Casa Blanca para llevar a la nación a una nueva etapa de la pandemia en la que el novel virus “no interrumpa nuestra vida cotidiana”, al tiempo que prepara a la nación para cualquier nueva variante que pueda surgir. Se basa en una estrategia nacional integral de seis pilares que emplea el mismo enfoque basado en la ciencia utilizado para combatir con éxito las variantes anteriores del COVID-19 a principios de este año. Este plan garantizará que se usen todas las herramientas disponibles para combatir el COVID-19, salvar más vidas en los próximos meses, mantener las escuelas abiertas y seguras, y proteger la economía.